Del mismo autor que la publicación anterior. Gerardo Velásquez Psicólogo, Venezuela
gvelasquezd@gmail.com
En algunas oportunidades cuando he estado
estudiando o investigando aspectos sobre la vejez he leído, el llamado decálogo
de la Vejez, de autor anónimo, que en esta oportunidad lo he extraído de un
artículo publicado en la Web por un grupo argentino que se autodenominan
Mayores en Movimiento, y que lo presentan como los 10 mandamientos para una
vejez feliz, que a continuación presento:
1.-Cuidarás tu presentación todos los días. Vístete
bien, arréglate como si fueras a una fiesta. Qué más fiesta que la vida.
2.-No te encerrarás en tu casa ni en tu habitación.
Nada de jugar al enclaustrado o al preso voluntario. Saldrás a la calle y al
campo de paseo. El agua estancada se pudre y la máquina inmóvil se enmohece.
3.-Amarás al ejercicio físico como a ti mismo. Un
rato de gimnasio, una caminata razonable dentro o fuera de casa. Contra la
inercia ¡diligencia!
4.-Evitarás actividades y gestos de viejo derrumbado.
La cabeza gacha, la espalda encorvada, los pies arrastrándose. ¡No! Que la
gente diga un piropo cuando pasas.
5.-No hablarás de tu vejez ni te quejarás de tus
achaques. Con ello, acabarás por creerte más viejo y más enfermo de lo que en
realidad estás. Y te harán el vacío. Nadie quiere estar oyendo historias de
hospital. Deja de autollamarte viejo y considerarte enfermo.
6.-Cultivarás el optimismo sobre todas las cosas.
Al mal tiempo buena cara. Sé positivo en los juicios, ten buen humor en las palabras,
sé alegre de rostro, amable en los ademanes. Se tiene la edad que se ejerce. La
vejez no es cuestión de años sino un estado de ánimo.
7.-Serás útil a ti mismo y a los demás. No eres un
parásito ni una rama desgajada voluntariamente del árbol de la vida. Bástate
hasta donde sea posible y ayuda. Ayuda con una sonrisa, con un consejo, un
servicio.
8.-Trabajarás con tus manos y tu mente. El trabajo
es la terapia infalible. Cualquier actitud laboral, intelectual, artística…
Medicinas para todos los males, la bendición del trabajo.
9.-Mantendrás vivas y cordiales las relaciones
humanas. En las del hogar, intégrate a todos los miembros de la familia. Ahí
tienes la oportunidad de convivir con todas las edades, niños, jóvenes y
adultos, el perfecto muestrario de la vida.
10.-No pensarás que todo tiempo pasado fue mejor.
Deja de estar condenando a tu mundo y maldiciendo tu momento. Alégrate de ser
parte del mismo y poder ver muchas cosas lindas y nuevas.
En definitiva la idea es llegar sano y feliz a esta
etapa de la vida. No es sentarse a esperar que la muerte llegue, se trata de
vivir plenamente hasta que el Señor lo tenga decidido. Seguir compartiendo,
hablando, riendo. Entender que no importa la edad que se tenga, el equilibrio
mental y psicológico, es el mejor y más calificado síntoma de salud.